Quién no ha soñado con disfrutar de oficinas allá donde nos toque viajar… Hace años, desde el mundo coworking más hippie, surgió una iniciativa wiki de la mano de uno de los jóvenes papás de los espacios de trabajo colaborativos: Tony Bacigalupo. Se le llamó Coworking VISA. Hoy es ya una plataforma con cerca de 500 espacios en todo el mundo que te ofrece la posibilidad de disfrutar de hasta 3 días de oficina flexible, sin coste alguno, solo por ser miembro (coworker, como nosotros decimos) de cualquier espacio de coworking adherido al programa.
Cuando hace unos años nos contaron esta película, me pareció tan increíble como muchas de las cosas que empezaba a disfrutar allá por 2015 en mis primeras tomas de contacto con el mundo coworking. La puesta en práctica fue aún mejor. Viaje a Mallorca por trabajo, oficina allí junto al equipo de Wohaby. Viaje a Barcelona, mesa de trabajo en CREC en pleno Eixample. Viaje a… el próximo será internacional, seguro, y espero visitar alguno de los espacios de Dublín, New York o Tokyo… ¿por qué no?
Y es que nuestras vidas y, por extensión, la parte laboral comienza a reunir características hasta hace bien poco antagónicas pero que hoy conviven con la mayor naturalidad en nuestro día a día. Bienvenida resiliencia. Podemos comenzar el día trabajando en un proyecto de emprendimiento muy muy local, para transformar nuestra terreta, desde nuestra nave nodriza: Genion Lab, tener reunión híbrida – online y presencial – a mediodía en Alicante desde nuestra segunda casa: TerretUp y terminarlo conectando con Colombia para hablar de las singularidades que comparten el mundo cooperativo y el coworking.
¿Y la parte Social?
Y no me refiero a las redes sociales, sino al animal social que llevamos dentro… Porque nuestro mundo no se puede reducir a una pantalla. O a muchas a la vez. Aquí es donde entran en juego conceptos clave como flexibilidad y movilidad. Porque la naturaleza de los espacios de trabajo ha cambiado. Casi nos empieza a dar ya igual que la mesa donde trabajamos no sea siempre la misma, o que esté siempre en el mismo lugar.
Pero lo que no nos da igual es el aislamiento, no poder tener a nadie para tomar café y reír mucho o llorar… o que llegue el viernes y nadie te proponga terminar la jornada en una terraza.
En el futuro del trabajo hay una fuerte inversión en tecnología – qué duda cabe- pero también en nuevos espacios: más flexibles, motivadores, productivos, amables, creativos, confortables… donde se una lo mejor del mundo físico y del digital.
Y en ello estamos. Creando espacios para conectar, trabajar y vivir.
Tendiendo puentes para acompañar a las personas que deciden emprender en nuestra terreta. La última aventura: los Bonos Interespaciales – que no conectan el Halcón Milenario con la Estrella de la Muerte – sino Genion Lab con TerretUp y te permiten trabajar en cualquiera de estos dos coworking con una tarifa única. Para que puedas elegir entre costa o interior de Alicante. Para que puedas comenzar a vivir tus jornadas laborales de otra manera. Pruébalo, te puede cambiar la vida…
Esther Navarro, Comunicación Genion Lab
Tag: oficinas coworking alicante
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